viernes, 15 de octubre de 2010

Pies descalzos en la orilla

Baila, baila,
ardiente arena,
sereno mar
baila tango en la orilla mojada,
agitada espuma, impasible roca;
baila,
baila en la orilla
entre dos cuerpos mojados.
Baila,
incansable brisa,
baila conmigo y
sigue las olas
que no hacen sino bailar;
baila, baila
fría arena, ardiente mar;
baila conmigo, ola serena,
o al menos déjame bailar.
Bailan, gotas de agua
sobre tu cuerpo van a bailar;
y tus ojos serán la arena
y tu piel ardiente mar,
porque hoy voy a bailar,
bailar, a la orilla del mar.

domingo, 10 de octubre de 2010

Sueño

Hay noches que duran más de lo que se supone; esas noches en las que el reloj da su bendición y duerme, olvidando en su sueño hacer correr los minutos que siempre sentencian al fin a los momentos más hermosos. Y, como si de una bula se tratase, pase lo que pase en ese tiempo dormido siempre se alcanzará el cielo.