viernes, 10 de junio de 2011

El viento aprendió a decir adiós para poder despedirse de las cosas que amaba, ya que no podía hacer más que dejarlas atrás.
Aún no he oído que el viento haya aprendido a no mirar atrás.

miércoles, 8 de junio de 2011

Pestañear para decir "me gustas"

La precisión del instante en que el chico le guiñó el ojo, mientras una paloma cruzaba su campo de visión con un espectacular vuelo rasante, le pareció adorable.

martes, 7 de junio de 2011

El tiempo está enamorado de la vida. Por eso permanece siempre a su lado, hasta que puede llevársela consigo.